Dime el índice de morosidad de tu comunidad, y te diré qué necesitas

Todo va bien cuando los propietarios de una comunidad cumplen con sus obligaciones de pagos. Aunque, es frecuente que aparezca una o más personas que se retrasan, convirtiéndose en vecinos morosos.

¿A quién reclamar? ¿Cómo hacerlo? Un administrador de fincas puede ayudarte con esto. Aquí contamos cómo proceder ante un deudor y qué medidas pueden aplicarse en cada caso.

LA VIA AMISTOSA COMO PRIMERA ALTERNATIVA

El Colegio Profesional de Administradores de Fincas de Madrid expresa con claridad que el único sitio permitido para exponer al deudor y su morosidad es en la convocatoria de la junta de propietarios.

De todas maneras, ¿no crees que es mejor llegar a un acuerdo conversando? En primer lugar, es importante conocer la razón de su atraso. Tal vez esté pasando por un apremio económico transitorio y se pueda arreglar sin llegar a una vía judicial.

En este caso, se puede plantear métodos de pagos en cuotas, siempre y cuando el vecino deudor esté dispuesto a responder esta condición. Para ello, debe ser aprobado por toda la junta de la comunidad y debe quedar asentado en el libro de acta.

Aunque si se ha intentado aplicar todas las medidas posibles y el vecino continúa en incumplimiento, tendrás que recurrir a la instancia judicial.

Pasos a seguir cuando una comunidad de propietarios tiene vecinos morosos

Algunas veces, sucede que en una comunidad existen varios vecinos que presentan deudas. En este caso, es más difícil que las cuentas del edificio estén al día.

Cuando no podemos llegar a un acuerdo con los vecinos para que cumplan con sus pagos, tendremos que proceder de la siguiente manera:

1. Convocatoria de una junta de propietarios. Contacta a los vecinos morosos a través de una carta impresa para organizar una reunión de la comunidad. Aquí se acordarán los plazos y las condiciones de pago.

Es necesario que esta notificación explique claramente el motivo de la convocatoria y esté certificada.  

A su vez, remarcar la importancia de asistir a la junta y los procedimientos a seguir en caso de que el vecino moroso no concurra.

Asegúrate de que el vecino reciba esta carta, incluso envíale un mail. Coloca una copia de la carta en algún sitio visible para toda la comunidad.

En este caso, es necesario contar con asesoría legal para orientarte acerca de las condiciones que una persona debe cumplir para considerarla morosa. También para saber si la totalidad de la deuda puede ser reclamada.

• Documento con los detalles de la deuda. Este escrito debe contener los detalles de la deuda y el compromiso que debe asumir el propietario moroso.

Tendrás que presentarlo el día de la reunión para que los vecinos deudores puedan ponerse de acuerdo respecto al pago de sus deudas.

Es importante que el documento sea firmado por el secretario encargado, el administrador del edificio y los propietarios morosos.

QUE HACER SI EL PROPIETARIO MOROSO NO SE PRESENTA A LA REUNION O NO SE LLEGA A UN ACUERDO

Aquí tienes dos opciones: darle un poco más de plazo al vecino para que pague sus deudas o empezar con los trámites judiciales.

Iniciar un procedimiento judicial

Si el deudor no cumple con su compromiso o no se llega a un acuerdo para el pago de la deuda, deberás notificar al propietario sobre el procedimiento judicial a seguir.

En general, este procedimiento se inicia con la presentación de un escrito al juzgado en el que se indicará:

• Identificación de la comunidad de propietarios que reclama.
• Identificación del vecino deudor y su dirección de residencia.
• Información de la deuda. Detalles como el tiempo de retraso, intereses generados, gastos varios, etc.

Este escrito debe ir acompañado de otro documento en el que se solicita la liquidación de la deuda. Además, adjunta las notificaciones enviadas anteriormente reclamando los pagos.

Recuerda que todo documento debe estar firmado por el administrador y por el secretario encargado para que tenga validez.

Una vez que presentas esta documentación y el juez la aprueba, él se ocupará de notificar al deudor que tiene un plazo de veinte días para saldar sus pagos.

En caso de que el vecino se niegue a pagar, puedes consultar con un administrador de fincas cómo deberías proseguir.   

Si tienes vecinos morosos no te desesperes. Acude a expertos en el tema para gestionar los trámites con rapidez y eficacia.